El triunfo de este sábado ante Tijuana tuvo un significado especial para el joven mediocampista Diego Lainez, quien no sólo convirtió su tercer gol en su carrera profesional, ya que tuvo su “bautismo de gol” en la Santa Sede del fútbol mexicano, el Estadio Azteca.

Tal cual, por primera vez en sus más de 20 partidos jugados con la playera azulcrema, el talentoso jugador pudo convertir en el Coloso de Santa Úrsula, y lo hizo para poner a su equipo como el único líder del Torneo Apertura 2018.

Tras el partido, Lainez se refirió a este nuevo hito en su carrera y manifestó que “es muy bonito anotar en el Estadio Azteca, un recinto importante, histórico, y contento por haber sacado los tres puntos, que es lo más importante”, agregando que “es muy bueno regresar a la titularidad de esta manera”.