Una noche de esas que le gustan al americanismo se presentó en Santa Úrsula. Las Águilas recibieron a Pachuca por el partido de Ida de la Semifinal del torneo Clausura 2022 ante un recinto pletórico y volcado por completo hacia la causa azulcrema, que buscaba hacer valer su condición de local para aspirar a meterse a la Final del certamen.

El equipo dirigido por Fernando Ortiz salió al campo con la intensidad que demanda esta instancia y jugaba más en territorio de los Tuzos, que sufrían en defensa, pero respiraban por la falta de contundencia milloneta toda vez que Federico Viñas tuvo la primera ocasión clara al quedar con ventaja para disparar dentro del área y estrellar la pelota en la humanidad de Oscar Ustari.

Si bien, las aproximaciones no eran numerosas, los de Coapa volvieron a tocar la puerta con peligrosidad en una acción donde Luis Fuentes llegó a fondo por izquierda, metió una diagonal retrasada justo a donde Diego Valdés llegó para tener un penalti en movimiento que mandó por encima del arco de forma increíble. Perdonaba América.

Poco antes del descanso, Guillermo Ochoa levantó la mano y dijo presente. Los de la Bella Airosa ejecutaron un tiro de esquina que fue bien rematado por Luis Chávez, pero se encontró con la figura de un Memo atento que reaccionó adecuadamente pese a la cercanía del testarazo. Todo quedaba igualado a cero para el descanso.

Con el complemento en marcha el Azteca explotó. Después de las fallas, finalmente América encontró la red cuando Diego Valdés se sacó la espina de su error previo al encontrar un rebote en el área originado por un disparo de Viñas que Ustari escupió. El chileno, atento en todo momento, aprovechó para mandar la bola al fondo y romper con el cero.

Sin hacer demasiado por encontrar la igualada, Pachuca se encontró con una ocasión inmejorable. Jorge Sánchez derribó con un ligero contacto a Avilés Hurtado dentro del área y pese a que el árbitro junto con los auxiliares del VAR tardaron en tomar una decisión, Pérez Durán tras la revisión marcó la pena máxima que Nicolás Ibañez ejecutó adecuadamente para igualar el marcador.

Sobre el cierre, América sufrió ante los embates de la visita y mostraba un tanto de cansancio. Pese a eso, Ortiz hizo movimientos para refrescar tanto su ataque como el medio campo. Al final, todo quedó en una igualada a uno que dejó la moneda en el aire y 90 minutos a matar o morir el próximo domingo en el Estadio Hidalgo.

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