El esperado debut de Víctor Dávila finalmente se concretó en la jornada 8 del Apertura 2024, cuando el Club América se enfrentó al Atlas. Después de semanas de especulaciones y negociaciones prolongadas con el CSKA de Moscú, el delantero chileno se incorporó al equipo para cubrir una posición crucial en la delantera azulcrema. Su llegada fue una de las más comentadas del mercado, debido al tiempo que llevó cerrarlo y a la necesidad del América de fortalecer su ataque, afectado por la salida de varios jugadores clave.
El América llegaba a este encuentro tras una victoria vital en el Clásico Nacional frente a Chivas, un triunfo que les devolvió la confianza tras un inicio de torneo complicado. Con la incorporación de Dávila, las Águilas sumaron una nueva pieza que promete dar mayor dinamismo al esquema de André Jardine. La afición estaba expectante de ver cómo se adaptaría el chileno, quien ya tiene una extensa trayectoria en el futbol mexicano tras su paso por equipos como Necaxa, Pachuca y León en la Liga MX.
Durante los primeros 45 minutos del partido ante Atlas, el América se mostró dominante. Con una ventaja parcial, Jardine decidió darle entrada a Dávila en la segunda mitad, sustituyendo a Álvaro Fidalgo y colocándolo en una posición ofensiva más retrasada, como media punta, detrás del capitán Henry Martín. Esta decisión estratégica mostró el primer indicio de cómo Jardine planea utilizar al chileno dentro del equipo.
El primer gol de Víctor Dávila con América
Apenas ingresó al terreno de juego, Víctor Dávila comenzó a demostrar por qué era tan esperado su debut. En su primera gran intervención, generó una clara ocasión de gol para Javairo Dilrosun, aunque no se concretó. Pero el momento clave llegó en el minuto 58, cuando Richard Sánchez le filtró un pase preciso. Dávila, con gran control y tranquilidad, definió de pierna derecha, anotando su primer gol con las Águilas y aumentando la ventaja sobre el Atlas. Su precisión y rapidez de adaptación fueron destacadas, demostrando que puede ser una pieza clave en la ofensiva.
Este debut con gol no solo demostró su capacidad para aportar al equipo en distintas posiciones, sino que también alivió la presión de un fichaje que generó grandes expectativas. Con su actuación, Dávila dejó en claro que está listo para enfrentar el reto que supone jugar en el club más grande de México.
El aporte de Dávila no se limita a su capacidad goleadora. El chileno es un jugador versátil que puede desempeñarse en varias posiciones del ataque, algo que Jardine aprovechará al máximo. Puede jugar como delantero centro, media punta o incluso como extremo, lo que le da muchas opciones al entrenador brasileño para hacer rotaciones y enfrentar la carga de partidos de la Liga MX.