La rivalidad entre América y Cruz Azul ha tenido grandes episodios desde hace varias décadas, pero sin lugar a dudas, el momento cumbre de este enfrentamiento llegó en la Final del torneo Clausura 2013 cuando los Cementeros estaban a segundos de ser campeones, pero Moisés Muñoz apareció para convertir una anotación que mandó el juego al alargue, posteriormente a los penales donde los de Coapa ganaron.

Hoy, a poco más de 10 años después de aquella noche del 26 de mayo del 2013 y en la víspera de un nuevo Clásico Joven, el ex guardameta de las Águilas confesó que ese juego en particular representa un gran recuerdo para él, pero la competencia entre ambas instituciones sigue al margen de que le tocó vivir una de las finales más emocionantes en la historia del futbol mexicano.

Para mí es un gran recuerdo y se queda en eso. La competencia sigue estando en pie y cada Clásico es una historia diferente, una historia nueva. Yo lo guardo así, como un gran recuerdo, la afición también lo tiene como un gran recuerdo en una de las finales más atractivas y emocionantes que ha habido en el futbol mexicano. Así lo tengo, guardado como un recuerdo, cada Clásico Joven es una nueva oportunidad para hacer historia”, comentó.

De igual forma, Moi dejó claro que lo sucedido en aquella Final será algo que vivirá eternamente en la memoria de los seguidores azulcremas, mientras que, por el lado de los Cementeros, debe ser un aliciente para sentir sed de revancha cada vez que se encuentren dentro de un terreno de juego.

RECUERDO PARA LA ETERNIDAD

“La afición de América vivirá con ese recuerdo grato eternamente posiblemente. Para Cruz Azul, creo que es bueno recordarlo para tener esa emoción y esas ganas de que en cada Clásico haya una revancha”, sentenció.