Después del escándalo protagonizado por Renato Ibarra luego de que su expareja Lucely Estefanía Chalá lo acusara por violencia doméstica e intento de femicidio, el extremo ecuatoriano de 29 años quedó en la mira en América. Si bien algunos directivos piensan en que hay que reincorporarlo al plantel profesional debido a la crisis económica por la pandemia del coronavirus, Emilio Azcárraga no da el brazo a torcer y uno de los máximos ídolos coincide con el propietario del club: Carlos Enzo Reinoso.

En la entrevista con David Faitelson por ESPN, el Maestro opinó: “En este país estamos viviendo situaciones terribles, en especial con las mujeres. Por eso yo quiero decirle, y sin haber grabado antes el video ni nada, que yo no lo dejaría en el América para nada. Juega muy bien y es un chico que a mí, cuando lo veía de afuera, me caía muy bien. Pero no…”.

El extremo, complicado por lo extradeportivo.

El chileno continuó en la misma dirección: “Esas cosas no deben pasar en el América ni en ningún equipo profesional”. Si bien el Cuerpo Técnico y ciertos dirigentes importantes lo consideran fundamental en la estructura del conjunto de Miguel Herrera, el americanismo ya está harto de ser a veces más protagonista en los medios y en las redes por lo extrafutbolístico, situación que le juega en contra al ex-Vitesse.

Ibarra ya suma más de 100 partidos oficiales con la playera de las águilas desde su llegada desde Holanda en 2016, colores con los que obtuvo cuatro Campeonatos. Por su parte, Reinoso es uno de los máximos íconos de la historia azulcrema: fueron en total casi diez años como futbolista con 364 encuentros, 95 tantos y 6 trofeos conquistados, además de sus etapas como timonel con un título más en su palmarés.

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Si bien América cuenta en esa posición con Andrés Ibargüen, Sebastián Córdova, Giovani dos Santos,Leonardo Suárez y hasta Jesús Escoboza, ninguno posee las características de Ibarra: hacer toda la banda de ida y vuelta, enviar centros peligrosos al área adversaria y sostener la intensidad física durante los 90 minutos de juego. A esperar entonces…