Tras oficializarse su salida del América, Ambriz hizo un balance de lo que fueron sus 15 meses como entrenador del equipo más grande de México.

Tan sólo unas horas después de haber sido cesado de su cargo como director técnico del América, Ignacio Ambriz brindó una extensa entrevista al diario Esto, en la cual tocó varios temas y realizó un balance de lo que fue su estancia en el Nido.

Le hubiese gustado haber podido terminar el torneo:

“Es difícil poder aceptar que estás fuera de América, cuando tenía muchas ilusiones en este torneo de lograr los objetivos que directiva, cuerpo técnico y jugadores nos habíamos trazado”.

“Te quedas con ese sabor amargo de no terminar este certamen y a la postre quisieras que a lo mejor fueras más cuestionado al final de un torneo, para ver qué se podía conseguir”.

El paso a paso de su salida:

Fue hoy (ayer) en la mañana. Normalmente siempre llegamos temprano. Hoy entramos a las 10. Entre 8 y cuarto y 8 y media ya estábamos en el club, junto con todo el cuerpo técnico, preparando lo que iba a ser la semana de esta jornada doble. Y siempre antes de los entrenamientos tenía mucha comunicación con Ricardo”.

“Muy poquito, de que qué pensaba, de lo que venía, cómo había visto el partido, y como le dije, ‘Ricardo, realmente fuimos un desastre, no jugamos nada bien, no nos salió nada, ni pasando por mí como entrenador, ni mis jugadores’. Algo anormal de lo que le puede pasar a este equipo. Y ‘sí es para alarmarse’, le digo, para estar preocupados, de que el equipo no tuvo reacción, no tuvimos llegadas a gol, salvo en los primeros 15 minutos, en los que el equipo medio intentó, y después del gol no tuvimos nada de reacción. Sí, ‘estoy de acuerdo contigo’, me responde. ‘¿Qué has pensado para el partido que viene?’ Le digo, ahorita ni en la cabeza me entra qué puedo pensar para el juego. ‘No, pues salte a entrenar. Yo estoy preocupado, no sé qué pueda venir. Estoy esperando llamadas de la gente de arriba, de los dueños, qué puede venir, qué puede pasar. Está muy difícil la situación’. Sí, entiendo todo lo que pueda venir, el responsable soy yo. Salimos a entrenar y después nos contó la decisión que se había tomado. Por ahí se manejó mucho que había renunciado. No renuncié, porque me siento capaz para revertir la situación, ni tampoco soy un tipo que tan fácilmente me baje de los barcos y diga adiós, ahí lo dejo. Había hablado un día antes con los jugadores después del partido, pero al final en este club mandan los resultados”.

“Podríamos decir que intento sacar pretextos, pero no soy un tipo de pretextos. Hoy simplemente los resultados en los últimos partidos no se nos dieron y por eso fue la toma de decisión de la directiva de hacerme a un lado”.

No se pudo despedir de los jugadores:

“No tuve mucho chance de despedirme de ellos. Entrenamos y después de la práctica tuvimos la junta. Cuando salimos no había muchos jugadores. No te niego que se me acercaron unos, como el ‘Chino’ Romero, Jonathan León, Dieguito Pineda, Hugo González. Fueron de los últimos que quedaban por ahí. Recibí una llamada de Moi. No pude, de antemano, despedirme de ellos, pero siempre les estaré agradecido de que me hayan dado el apoyo, siempre estuvieron al pendiente”.

El balance de su paso por el Nido:

“Creo que no me voy en blanco. En este año del Centenario entregué, gracias a Dios y a los jugadores, un título. Muchos no quieren darle el valor que tiene, pero es un título que hoy al club le permite ir a un Mundial de Clubes. Era una revancha que internamente lo habíamos manejado. Hoy no se da (continuar para disputar ese torneo), pero al que le toque ir (en su lugar), sí te puedo decir que me apunté para que el club volviera a ese Mundial de Clubes”.

“Por eso a lo mejor estoy tranquilo, porque no le debo nada a nadie. A nadie le vine a robar ni a mentir. Vine a trabajar con mucha humildad y hasta el día de hoy lo hice con ese gran compromiso y profesionalismo. Hoy nos juntamos (con su cuerpo técnico) y quedamos de irnos con la cabeza arriba, nada de agacharnos. En el futbol entendemos que es así. Entiendo que cuando el señor (Fabio) Capello fue campeón del Real Madrid y ya no siguió. Salió. Me acuerdo mucho de esa imagen, porque vivía en España. Si este señor que ha ganado todo, después de un campeonato queda fuera, todos los demás quedaremos. No me sorprendió ni me espantó, pero entiendo que el futbol, hoy en la actualidad, va cambiando mucho, es muy exigente y más en un club como América”.

Ahora se tomará un descanso y aprovechará para continuar su formación:

“Mira, por el momento yo creo que es olvidarme un poquito de futbol. Por ahí me gustaría irme, acercarme con entrenadores con los que tengo buena relación, ver futbol, tener charlas, me gustaría irme a Sudamérica, tengo buenas amistades, para acercarme y seguir enriqueciendo lo que es el futbol. Y después en esto del futbol nunca te puedes cerrar las puertas. No sé qué pueda surgir el día de mañana, pero me quiero dedicar a la familia, estar cerca de los seres queridos y de alguna u otra forma es simplemente respirar otra vez para recobrar fuerzas y tener otra oportunidad”.

“En esto del futbol todos los días tienes que seguir aprendiendo. Hay grandes entrenadores que siempre me ayudaron a crecer. Aquí hay una carrera de Johan Cruyff, me gustaría hacerla, seguir aprendiendo. Mientras más me pueda enriquecer de futbol, que esté mejor preparado y consciente de que pueden venir mejores cosas”.

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