Antes de debutar en el Apertura, aquí está el repaso de todos los procesos interrumpidos últimamente en América.
Los proyectos a largo plazo son lo más deseable en cualquier club de fútbol del mundo, pero últimamente en América no se respetan y quedó muy claro con los entrenadores: Antonio Mohamed fue Campeón y a los pocos días no se le renovó el contrato, en tanto que Gustavo Matosas se consagró en la Concachampions y le mostraron la salida por diferencias con la directiva en cuanto a las contrataciones.
Habrá que ver si se mantiene esta política con los años.
Ahora le han otorgado a Ignacio Ambriz la responsabilidad, un timonel al que evidentemente le faltan merecimientos y experiencia para encarar la tarea, aunque recién empezó y hay que darle crédito. Además, le otorgaron poco margen de maniobra con los refuerzos Adrián Marín, Andrés Andrade, Gil Burón, Javier Güémez y acentuándolo con lo acontecido en el tema de Alberto García Jr.
Más allá de que los logros deportivos en los últimos años fueron magníficos e incuestionables, la gestión de Ricardo Peláez como Presidente y del resto de los directivos ha sumado contratiempos innecesarios como las modificaciones permanentes al mando del plantel profesional. ¿Se sostendrá esta política a lo largo del tiempo? No parece lo más conveniente para el más grande.
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