A pesar del penal fallado, Mateus tuvo un gran recibimiento en su barrio natal.

Luego de su participación en el Mundial de Rusia 2018 con la Selección Colombia, donde quedó eliminado en los octavos de final ante Inglaterra, Mateus Uribe regresó a su Medellín natal y tuvo un gran recibimiento en el barrio de su infancia.

A pesar de haber fallado su penal en la definición, el mediocampista del América hizo una buena tarea en la Copa del Mundo y así se lo reconocieron sus compatriotas, quienes le dieron la bienvenida con apalusos, cornetas, mantas y mucho color.