México sigue afinando su once ideal rumbo a la Copa Oro, y Javier Aguirre no quiere desaprovechar lo mejor que tiene al frente: Raúl Jiménez y Santiago Giménez. Dos delanteros de perfiles distintos, pero que poco a poco comienzan a complementarse dentro del terreno de juego.

En su más reciente amistoso ante Suiza, el Tri ofreció varios destellos ofensivos, pero el que más destacó fue una combinación entre Raúl y el ‘Bebote’ que terminó en gol. La jugada no solo significó el empate parcial, sino que encendió la ilusión de una dupla capaz de cargar con el peso ofensivo del equipo en un torneo oficial.

La asistencia de Raúl Jiménez para el gol de Santiago Giménez

Corría el minuto 50 del partido cuando México presionó alto en campo suizo. Raúl Jiménez peleó con todo un balón dividido y, tras un rebote, logró habilitar a Santiago Giménez con un pase filtrado en el área. El del Milan aprovechó la fortuna del rebote y cerró la jugada con un remate de cabeza que puso el empate para el Tri.

La jugada mostró lo que muchos esperaban: un Raúl inteligente en la asociación, saliendo del área, y un Santiago letal dentro de ella. Cada vez más compenetrados, los dos empiezan a generar jugadas que ilusionan pensando en instancias importantes.

El rol clave de Raúl Jiménez bajo el esquema de Aguirre

Raúl es, sin discusión, el jugador más experimentado del ataque mexicano. Y bajo el mando de Aguirre, ha asumido ese papel con naturalidad: baja a recibir, crea juego, incomoda al rival y además se asocia con los extremos y volantes.

Mientras Santiago es el rematador, Raúl actúa como el generador, lo que le da equilibrio al sistema. Además, si mantiene su nivel, tiene en la mira uno de los récords más importantes: convertirse en el máximo goleador en la historia del Tri. Y por jugadas como la de hoy, parece que lo puede lograr.