El Club América y Santiago Baños continúan trabajando intensamente en la búsqueda de refuerzos para el próximo Clausura 2026, torneo en el que la directiva está obligada a mejorar el nivel del plantel tras las exigencias de los últimos meses. En este escenario, uno de los nombres que ha comenzado a tomar fuerza es el de Jesús “Canelo” Angulo, futbolista de los Diablos Rojos del Toluca, cuyo posible fichaje se ha convertido en tema relevante en Coapa.

Según información revelada en las últimas horas por el periodista David Medrano, el América estaría considerando seriamente realizar una inversión importante para adquirir a Angulo, jugador que se ha consolidado como uno de los mejores elementos del futbol mexicano por su calidad, visión y capacidad para desequilibrar. Este movimiento respondería a la intención de fortalecer zonas creativas y ofensivas del equipo en busca de un mayor volumen de juego.

Sin embargo, la llegada del Canelo podría traer consecuencias directas dentro de la plantilla actual azulcrema. Entre los jugadores que se verían afectados se encuentran Isaias Violante, excompañero de Angulo en Toluca, y Alexis Gutiérrez, refuerzo reciente del América que ha sido criticado por su rendimiento.

Isaías Violante sería uno de los perjudicados con la llegada de Jesús Angulo al América. (Getty Images)

La razón es clara: Jesús Angulo puede desempeñarse tanto como extremo izquierdo —posición natural de Violante— como en funciones de volante creativo —zona donde compite directamente con Gutiérrez—. De concretarse el fichaje, ambos jugadores tendrían un rol mucho más secundario o incluso podrían salir del club en busca de oportunidades, ya que el América buscaría potenciar su ataque con un futbolista más consolidado y determinante.

¿Cuándo finaliza el contrato de Jesús Angulo con Toluca?

El último factor a considerar es su situación contractual. Jesús “Canelo” Angulo tiene contrato vigente con Toluca hasta junio de 2027, por lo que el América estaría obligado a realizar un gasto considerable para concretar su incorporación. Esto coloca al fichaje como una apuesta fuerte de la directiva, que deberá evaluar el beneficio deportivo frente al impacto económico que implicaría traer al atacante para el Clausura 2026.