América no está teniendo suerte con los arbitrajes en esta Liga MX, más allá de lo que dicen los demás por envidia de que al más grande lo favorecen y otras cuestiones. Por ello, Miguel Herrera volvió a quejarse en la conferencia de prensa posterior al 2-2 contra Pumas en el Estadio Azteca, en un Clásico Capitalino en el que sus dirigidos terminaron con nueve por las expulsiones de Roger Martínez y Bruno Valdez.
“Dicen que el codazo de Roger es roja y ellos hacen una igual y no señalan nada. No se mide con la misma vara”, se cansó el Piojo, aunque su tono no fue tan duro como hubiera sido en una eventual derrota y pérdida del invicto personal ante los universitarios.
Por último, se refirió al grito salvador de Henry Martin: "La recompensa es hacer una buena jugada y hacer un buen gol. Me deja tranquilo la actitud y determinación por no bajar los brazos y no tener esos errores, porque no se marca igual todo”, cerró Herrera.
El gol agónico de Henry lo salvó: