El último Clásico Capitalino entre el Club América y los Pumas terminó con una contundente victoria azulcrema por 2-0, reafirmando la superioridad del equipo más grande de México sobre su rival universitario. Este resultado no sorprendió a nadie, ya que las Águilas han dominado los enfrentamientos recientes, dejando claro que el América sigue siendo el equipo a vencer en la Liga MX.
Sin embargo, la polémica no terminó con el silbatazo final. Más allá de la lamentable pelea en las gradas del estadio, las decisiones arbitrales también dieron de qué hablar. Después de varios días, la Comisión de Arbitraje reveló los audios de la conversación entre el árbitro Fernando Hernández y el VAR, admitiendo un error que condicionó el partido, aunque curiosamente evitaron hablar de otros dos fallos que perjudicaron directamente al América.
El error arbitral que admitió la Comisión de Arbitraje
La jugada en cuestión fue la expulsión del centrocampista peruano de Pumas, Piero Quispe, tras un fuerte tallón sobre Erick Sánchez. En su momento, Fernando Hernández no dudó en mostrar la tarjeta roja, pero tras el análisis posterior, la Comisión de Arbitraje reconoció que se trató de un error y que la jugada solo merecía tarjeta amarilla.
Este fallo dejó con 10 hombres a los universitarios, algo que la Comisión no tardó en reconocer. Lo curioso es que, mientras admitieron ese error, decidieron guardar silencio sobre otros dos incidentes que claramente afectaron al América y que pudieron cambiar el rumbo del partido.
Los errores contra el América que no mencionó la Comisión
El primer incidente ocurrió cerca del minuto 14, cuando Adalberto Carrasquilla agredió a Álvaro Fidalgo con una patada intencional a la altura del estómago. Una jugada que, por reglamento, merecía tarjeta roja, pero el árbitro no mostró ni siquiera una amarilla.
Más tarde, Ignacio Pussetto, delantero de Pumas, entró con fuerza desmedida sobre Alan Cervantes. Aunque la jugada dividió opiniones, Fernando Guerrero, analista arbitral de TUDN, consideró que la falta también era merecedora de expulsión. La Comisión de Arbitraje, sin embargo, decidió pasar por alto ambos errores, dejando en claro que, cuando se trata del América, las injusticias suelen ser ignoradas.