La época dorada más reciente del Club América bajo el mando de André Jardine no se entendería sin el capitán Henry Martín. El delantero yucateco fue decisivo en finales y semifinales, con goles que marcaron títulos y noches memorables en el Estadio Azteca.
Hoy, sin embargo, aquel ídolo goleador parece muy lejos de su mejor versión. El físico no lo respeta, las sensaciones no son las mejores y el panorama abre una incómoda pregunta: ¿hasta dónde podrá seguir cargando con la responsabilidad de ser el “9” del América?
El historial de lesiones que golpea a Henry Martín
El 2025 ha sido cruel con el capitán azulcrema. Se perdió gran parte del Clausura por molestias físicas, regresó entre algodones para la Liguilla y después enfrentó una tendinitis en el talón de Aquiles que lo puso al borde del quirófano. El tratamiento conservador lo mantuvo en pie, pero no lo regresó al mismo nivel.
Desde su vuelta apenas suma un partido como titular y algunas apariciones desde el banquillo. Ni goles ni influencia en el juego: un contraste enorme con aquel Henry que resolvía partidos decisivos. Para un líder del vestidor, la fragilidad física empieza a ser un problema mayúsculo.
¿Debe el América replantearse su futuro con Henry Martín?
Con 32 años, la realidad es que Henry pasa más tiempo recuperándose que brillando en la cancha. Su contrato lo liga al América hasta 2027, pero la directiva sabe que la apuesta es riesgosa: un ídolo histórico que ya no garantiza continuidad ni goles.
La llegada de la Pantera Zúñiga mitiga la urgencia, pero no borra la incertidumbre. El americanismo, acostumbrado a verlo en los momentos más grandes, hoy debe enfrentar la posibilidad de un cambio de estafeta. La pregunta ya no es si Henry volverá a ser el de antes, sino si el club puede seguir esperándolo.