El arco de Coapa volvió a sonar con seguridad. Tras semanas de críticas, Luis Ángel Malagón firmó una intervención decisiva en la remontada del América ante Tigres, resultado que catapultó a las Águilas al subliderato del Apertura 2025.

La noche en el Universitario pedía temple: América venía de atrás, el local apretaba y el margen de error era mínimo. Entonces apareció el guante salvador que mantuvo con vida a las Águilas… y cambió el partido.

El vuelo de Malagón al tiro de Ángel Correa

Cerca del minuto 65, Tigres dispuso un tiro libre a la entrada del área. Ángel Correa tomó el balón, la barrera se abrió y el disparo salió raso a la base del poste. Cuando el estadio ya cantaba gol, Malagón voló abajo y, con manos firmes, ahogó el grito.

Esa estirada fue más que una atajada: quebró el impulso felino, sostuvo la reacción azulcrema y le dio al equipo el tiempo que necesitaba para completar la remontada. En noches así, una mano vale lo mismo que un remate.

Del bache a la respuesta: el repunte del arquero azulcrema

Hace unas semanas, el portero americanista vivía su tramo más cuestionado desde que llegó a Coapa. Hoy, tras actuaciones sólidas en Leagues Cup y Liga MX, recupera confianza con atajadas que suman puntos y victorias.

El triunfo en patio ajeno fue un golpe de autoridad y un respaldo al plan de Jardine: defensa concentrada, arquero determinante y pegada cuando cuenta. Con el subliderato en la bolsa y el arco en buenas manos, América mira a la Jornada 6, visita al Atlas, con el ánimo por las nubes y la convicción de que su guardián volvió a marcar diferencia.