A poco más de un día de haber manifestado públicamente su interés de querer venir a jugar en la Liga MX, y defender la gloriosa playera del América, el chileno Arturo Vidal tuvo un gesto poco afortunado en la derrota de México ante Chile en Querétaro.

Resulta que tras la anotación de Nicolás Castillo en el minuto 87, que le dio el triunfo a La Roja ante el Tri, el hoy futbolista del Barcelona miró a los aficionados ubicados en las tribunas del Estadio La Corregidora, puso su dedo índice en la boca y los mandó a callar, generando la reacción inmediata de los fanáticos, quienes lanzaron proyectiles contra los chilenos.

Si bien, segundos después le pedía a los mismos aficionados calma y que dejarán de lanzarles elementos, incluso luego juntó sus palmas pidiéndoles disculpas por su gesto inicial, el daño ya estaba hecho.