El domingo se cumplieron 10 semanas de la operación a la cual se sometió Nicolás Castillo tras sufrir una fractura de peroné en el duelo contra Tijuana por la jornada 3 del Torneo Apertura 2019.

Aunque el parte médico tras la operación informó que la recuperación le demandaría unas 12 semanas, el chileno ya está listo para hacer su regreso a las canchas y sumaría minutos el sábado ante Necaxa.

Una de las claves por las cuales Nico aceleró los tiempos de su rehabilitación sería el hecho de haber comenzado la misma cuando todavía tenía el yeso en su pierna.

Los trabajos que realizó el delantero andino con el yeso lo ayudaron a no perder mucho su forma física y acortar así los tiempos de la recuperación.