El 12 de octubre se celebra un día muy especial para el futbol mexicano, ya que el Club América cumple 108 años de historia. En un año lleno de logros y títulos, la celebración llega en un momento clave para la institución. Emilio Azcárraga Jean, dueño del equipo, se pronunció en redes sociales con un emotivo mensaje que destaca la grandeza y trayectoria de las Águilas a lo largo de más de un siglo.
Azcárraga Jean, quien heredó el legado de su padre, Azcárraga Milmo, en 1997, ha sido una figura fundamental en la consolidación del América como el equipo más ganador del futbol mexicano. A través de un mensaje en su cuenta de X (antes conocida como Twitter), el empresario recalcó la importancia del trabajo duro, las caídas y los éxitos que han acompañado al club desde su fundación en 1916. “La grandeza no es fácil, pero aquí estamos… 108 años después, más fuertes que nunca”, expresó Azcárraga, dejando claro que cada tropiezo ha servido para hacer más fuerte al equipo.
América, el club más exitoso de México
El contexto de este aniversario no podría ser mejor para las Águilas. Con André Jardine en el banquillo, el equipo ha demostrado ser una potencia en la Liga MX, logrando el bicampeonato de liga y sumando otros títulos como el Campeón de Campeones y la Campeones Cup. Estos logros han permitido que el América amplíe su ventaja como el club con más trofeos en la historia del futbol mexicano, superando ampliamente a su acérrimo rival, Chivas de Guadalajara.
Los éxitos recientes no solo han fortalecido al equipo en lo deportivo, sino también en lo institucional. Bajo la dirección de Azcárraga, el club ha mantenido su identidad de grandeza, dominando tanto a nivel local como internacional, consolidándose como una de las franquicias más poderosas y valiosas del continente.
Un mensaje que trasciende en la historia del América
El mensaje de Emilio Azcárraga llega en un momento en el que la afición azulcrema está llena de optimismo y esperanza por los resultados del equipo. En redes sociales, las palabras del dueño resonaron entre los seguidores, quienes no solo celebraron los 108 años de historia, sino también la promesa de seguir trabajando por más éxitos.
El aniversario también sirve para recordar que la grandeza del América no se construyó de la noche a la mañana. Cada caída y cada derrota, como bien menciona Azcárraga, ha servido para elevar al equipo a nuevas alturas. En un club donde la exigencia es máxima, este tipo de declaraciones refuerzan la conexión entre la directiva, los jugadores y la afición.