Aunque públicamente se insiste en que hay plena sintonía entre la dirección deportiva del Club América y el cuerpo técnico de André Jardine, lo que se ve en la cancha pinta un panorama muy distinto. Las decisiones del técnico brasileño han dejado claro que no todos los refuerzos que le han traído son de su agrado.

Futbolistas llegados como Alexis Gutiérrez, Alan Cervantes o Víctor Dávila acumulan partidos en la banca, incluso cuando el equipo necesita variantes urgentes. A pesar de tener un plantel limitado, Jardine parece enviar un mensaje con sus alineaciones: algunos jugadores simplemente no son opción real para él.

¿Jardine ignora a los refuerzos que llegan desde arriba?

Desde su llegada en 2023, André Jardine ha trabajado con un plantel cada vez más debilitado. Las ventas de figuras como Richard Sánchez o Diego Valdés nunca han sido compensadas con refuerzos del mismo nivel. Y ahora, a pesar de las carencias, el técnico prefiere no utilizar a quienes llegan de parte de Santiago Baños.

Ni siquiera en contextos donde se necesita remontar, el estratega recurre a sus nuevos atacantes. La señal es clara: no confía en ellos o simplemente no los pidió. Mientras tanto, el América se sigue estancado en finales… y los fichajes no marcan diferencia.

Los nombres que sí pidió Jardine… y no llegaron

De acuerdo con diversas filtraciones, el entrenador brasileño ha solicitado perfiles específicos para su esquema: Juan Manuel Sanabria, Rodrigo Dourado y Vitinho eran prioridad. Pero salvo el caso del primero que se cayó a último momento, ninguna petición ha sido atendida.

A pesar de haber sido campeón y llevar al América a varias finales, Jardine sigue siendo ignorado por la dirección deportiva. La desconexión es real, y está afectando al equipo donde más duele: en los momentos clave.