Después de haber sufrido la impericia del cuerpo arbitral en el primer tiempo de la Final de Ida del Torneo Apertura 2018, Bruno Valdez sacó ventaja de ella en el complemento.

Tras no haber advertido un claro penal de Igor Lichnovky sobre el zaguero americanista, Fernando Guerrero le perdonó la vida al paraguayo después de un golpe a Iván Marcone.

Ambos futbolistas estaban forcejando en el área cementera previo a un tiro libre en favor de las Águilas, cuando Valdez le dio un puñetazo en el rostro al mediocampista celeste. Sin embargo, ni el silbante ni el VAR advirtieron la jugada y no zafó de ser expulsado.