América Femenil está en la Liguilla. El torneo estuvo lleno de altibajos para las azulcremas, pero su presencia en la fiesta grande es un hecho y a decir de Renata Masciarelli, el equipo tiene la capacidad de mostrar una cara completamente distinta a la que exhibieron en distintas jornadas del Guard1anes 2021.

“En Liguilla es empezar de nuevo. La mentalidad cambia porque te juegas la vida cada tres días por sacar la mayor cantidad de goles de diferencia y que no te anoten cuando estás en casa. Ahí cualquier equipo es peligroso. Lo más probable es que nos toque con Tigres, sabemos que inicia duro, pero no es como que nunca hayamos jugado esos partidos. El equipo va de menos a más, me alegra ver a mis compañeras metiendo cada vez más las manos, con más idea, teniendo más el balón. En Liguilla América puede presentar otra cosa muy diferente a lo que fue el inicio y la mitad de la temporada”, señaló.

Durante la plática que sostuvo con Águilas Monumental, la portera americanista reconoció que este certamen resultó atípico para lo que en Coapa acostumbran y apuntó a todas las dificultades que tuvieron que encarar a lo largo de las 17 jornadas, así como a la capacidad del plantel crema de reponerse a los momentos difíciles.

“Obviamente ha sido un torneo atípico para nosotras, ha sido muy difícil en lo personal y en lo grupal. Hemos tenido que sobrellevar desde lesiones hasta resultados malos, que hubiera modificaciones en el cuerpo técnico. Ha sido un torneo muy difícil, pero nos hizo crecer como personas y jugadoras. Es complicado cuando hay cambios así de fuertes, pero el equipo lo ha sabido llevar como lo demostramos en los últimos juegos, sacamos lo mejor que pudimos, fuimos más sólidas. Eso es de un equipo que ha llegado a madurar y estoy super orgullosa de tener ese tipo de compañeras a mi lado que nunca bajaron las manos”, expresó, al tiempo de agregar que, para ella, las lesiones fueron el principal talón de Aquiles en el Nido.

“Para mí, las lesiones fueron una de las razones más importantes porque no había consistencia, no podíamos trabajar al 100 por ciento, había veces que tenían que parar a una jugadora uno o dos días para no hacer que una lesión fuera más fuerte, pero eso no te deja agarrar el ritmo que necesitas para jugar. Yo me perdí ocho jornadas, entonces cada quien tuvo batallas difíciles. Lo del cuerpo técnico es otra cosa, decisión del club sobre lo que era lo mejor, decisión también de Leo (Cuellar) al sentir que la conexión ya no funcionaba. Son decisiones que se tienen que tomar en cuanto a ciclos. Nos decía Leo que parecía que siempre estábamos remando contra algo, fue difícil en lo mental también. América siempre te exige ser lo mejor y hay que acostumbrarse a esa presión”, detalló.

Pese a todo, lo que resaltó Renata fue la manera en la que valoran que al final el boleto a la Liguilla lo consiguieron por méritos propios a pesar de los bandazos que dieron en el camino.

“Es super valioso para nosotras. Cuando nos faltaban seis partidos sabíamos que dejamos ir muchos puntos, sabíamos que si no había un cambio de actitud con nosotras no nos iba a alcanzar y para nosotras no cabía en la mente que América necesitara milagros o ayuda para entrar. Vamos a rifárnosla porque cada partido será una final”, afirmó.

LA DIFÍCIL DESPEDIDA DE CUELLAR

Uno de los momentos más críticos en el torneo para América fue la renuncia de Leonardo Cuellar del cargo de director técnico tras perder el Clásico contra Chivas en el Estadio Azteca. Y es que para Masciarelli, fue extraño ya no contar con la presencia del ahora ex entrenador en Coapa y hubiese deseado que se marchara de una manera diferente.

“Fue muy raro no tener a Leo (Cuellar). Llegar al día siguiente a entrenar y que no estuviera, hoy en día se siente raro que no esté. A mí me ha tocado estar casi dos años aquí, no me imagino lo que las que llevan cuatro sienten en ese sentido. En lo personal, no me gustó el partido en el que tuvo que irse, me hubiera gustado que si ya era su elección terminar el ciclo, que se hubiera ido con nosotras ganando un campeonato. La verdad me duele no haberle podido dar más herramientas para que pudiera irse bien y que tuviera que hacerlo en un partido tan feo como el que vivimos contra Chivas”, sentenció.