Si esta acción hubiera beneficiado al América, las redes sociales y los programas deportivos estarían inundados de comentarios acusando favoritismos arbitrales hacia las Águilas. Sin embargo, como sucedió en contra del conjunto azulcrema, este hecho pasó prácticamente desapercibido, dejando un sabor amargo entre los seguidores del Club América.
Durante la final del Apertura 2024 de la Liga MX, Rayados de Monterrey se adelantó en el marcador con un gol de Sergio Canales. En la jugada previa, Luis Ángel Malagón poco pudo hacer para evitar la anotación. Sin embargo, lo que no se perdona es que el árbitro no marcara una clara falta sobre Alejandro Zendejas, que pudo cambiar el destino de esa jugada.
Falta sobre Alejandro Zendejas que el árbitro no señaló
En una disputa por el balón, Germán Berterame cargó por la espalda a Alejandro Zendejas, quien fue derribado de forma evidente. A pesar de estar a pocos metros de la acción, el árbitro Víctor Cáceres decidió no marcar la infracción, permitiendo que la jugada continuara. Segundos después, el balón terminó en los pies de Sergio Canales, quien anotó para Monterrey.
Este gol inclinó momentáneamente la balanza a favor de Rayados. Sin embargo, minutos más tarde, Kevin Álvarez se encargó de devolver la paridad al marcador, dejando el partido 1-1 al medio tiempo. A pesar de esta reacción, el error arbitral sigue siendo un punto de discusión entre los aficionados americanistas, quienes consideran que la falta fue determinante en esa jugada.
¿Inexperiencia de Víctor Cáceres o criterio de liguilla?
Esta final marcó el debut de Víctor Cáceres como árbitro principal en una final de Liga MX. A pesar de que la comisión de arbitraje contaba con opciones más experimentadas, decidió otorgarle esta oportunidad al joven silbante. Sin embargo, su actuación dejó dudas, especialmente en el criterio utilizado para permitir contactos como el sufrido por Zendejas.
Es común escuchar que el arbitraje en fase regular es diferente al de liguilla, donde se tiende a ser más permisivo para favorecer el ritmo de juego y evitar pausas por contactos menores. Sin embargo, esta filosofía no debería aplicarse a infracciones claras como la que afectó al América. La pregunta que queda en el aire es si este error fue producto de la inexperiencia o simplemente de un criterio demasiado ambiguo.