El América cerró la fase regular con una derrota inesperada ante Toluca que le cambió por completo el panorama rumbo a la Liguilla. Lo que parecía una ruta favorable hacia el título se transformó en una travesía llena de obstáculos.
El planteamiento de André Jardine fue duramente criticado, especialmente por iniciar el encuentro sin un delantero nominal. Ese ajuste táctico terminó costándole caro a las Águilas, que ahora deberán remar contracorriente si quieren levantar el trofeo.
América se complicó en la Liguilla por perder
Aunque el equipo de Coapa tendrá la ventaja del campo para los cuartos de final frente a Rayados, su situación se complica en caso de avanzar. A partir de semifinales, perderían el beneficio de cerrar en casa ante rivales como Tigres, Cruz Azul o Toluca, todos mejor posicionados en la tabla.
Además, el criterio de desempate tampoco favorecerá al América más allá de los cuartos. Si empata en el marcador global, quedaría eliminado automáticamente, lo que incrementa la presión sobre un plantel obligado a reaccionar después del tropiezo en Toluca.
El equipo de Jardine deberá reencontrar su mejor versión y recuperar la contundencia ofensiva que lo caracterizó. Un solo error podría costarle la oportunidad de disputar la final, y la afición azulcrema espera una respuesta inmediata del equipo en el momento decisivo de la temporada.
