América se encuentra en la Gran Final del futbol mexicano tras cuatro años de no conseguirlo. Los azulcremas están a 180 minutos del título y para ello, deberán derrotar a Tigres en una serie que luce sumamente pareja toda vez que se enfrentarán dos de los planteles con más recursos en la Liga MX, además de dos de los equipos con mejores números en este semestre.
Antes de que iniciara la campaña, la incertidumbre invadía Coapa por la falta de director técnico y cunado se dio a conocer que André Jardine sería el encarado de tomar las riendas del equipo, no faltaron las críticas; sin embargo, con base en trabajo, el timonel brasileño llevó a las Águilas hasta la Final apenas en su primera campaña.
Sin embargo, el entrenador americanista no se dijo sorprendido por este logro, pero más allá de atribuirlo a algo individual, apuntó hacia la capacidad y recursos de la plantilla que dirige. Con eso a su favor, sacó el mayor provecho posible antes de pensar en hacer modificaciones radicales o imponer sus deseos en el armado del equipo.
“Sinceramente sí (esperaba llegar a la Final), porque conocer el grupo que tiene América, por observar mucho a América en otros torneos, pensaba que tenía un equipo con mucho potencial y cuando cae en mí el comando de un equipo que tiene argumentos, fuimos inteligentes de aprovechar lo que tenían de bueno, no cambiar todo y poner mis ideas”, confesó.
Jardine a dos pasos de ser campeón con América
En ese mismo tenor, André aceptó que tomaron ideas de juego que ya estaban plasmadas en América y le agregaron conceptos propios para conseguir no solamente estar en esta instancia, también haber hecho un semestre en el que terminaron como líderes generales, la mejor ofensiva y el equipo menos goleado.
“Absorbimos ideas que aquí estaban y permitieron al equipo trascender en otro nivel y fue un poco de nuestro camino, no solo estar en la Final, la campaña que hicimos, terminar como la mejor ofensiva, mejor defensiva; intentamos corregir las cosas que no salían tan buenas y por eso tenía la confianza que iba a ser capaz de dar este paso y quizá dos más para ser campeón”, compartió a TUDN.
El mayor reto de Jardine al frente de América
Para llegar hasta este punto, América tuvo que sortear a lo largo del certamen una serie de complicaciones que tuvieron que ver con lesiones de diferentes jugadores. Esto representó un reto para Jardine, quien aceptó que no tener al grupo completo para trabajar hizo difícil todo, pero a pesar de eso encontraron la manera de reponerse.
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“Lo más difícil es que de verdad no conseguimos tener a todo el grupo en ningún momento; siempre había un par de lesionados, cuando encontrábamos un camino se lesionaba un jugador que es clave y era buscar una adaptación e ibas a un partido con nuevo equipo, cuando todo iba bien perdías otros dos y había que encontrar una forma más sólida de atacar, de jugar, queríamos tener las variantes, pero esta idea fue muy difícil por las lesiones”, culminó.