Desde hace más de un año, André Jardine ha insistido en fichar a Juan Manuel Sanabria, mediocampista uruguayo al que dirigió en el Atlético de San Luis y que considera pieza clave para fortalecer su plantilla en el América. En el verano de 2024 lo pidió como prioridad, pero en su lugar llegó Cristian Borja. Hoy, con la inminente salida de Diego Valdés, el deseo de Jardine ha resurgido… pero el panorama no es nada sencillo para el conjunto azulcrema.

Aunque América ya se ha activado en el mercado de fichajes, según la información de Karen Peña de ESPN, la competencia por Sanabria es mucho más fuerte de lo que parece. El futbolista charrúa ha despertado interés desde Europa y, si Coapa no se mueve rápido o no libera espacio con la salida de Brian Rodríguez, podrían volver a dejar a su DT sin el refuerzo que tanto quiere.

El futbol europeo también quiere a Juan Manuel Sanabria

De acuerdo con Peña, clubes de la Premier League inglesa y de LaLiga española han comenzado a seguir de cerca a Juan Manuel Sanabria. La buena temporada del uruguayo con San Luis y su juventud lo han puesto en la mira internacional, justo cuando América buscaba adelantar su fichaje. Sin embargo, mientras no se concrete la baja de Brian Rodríguez o algún otro extranjero, las Águilas no pueden hacer espacio en su plantel.

Este interés desde Europa complica seriamente el escenario. Si América se tarda en cerrar el movimiento, Sanabria podría tomar el vuelo al viejo continente y dejar plantada la propuesta del club de Jardine, como ya ocurrió hace un año.

Sanabria ya rechazó al América una vez por esperar a Europa

En el verano de 2024, América ya había negociado por Juan Manuel Sanabria, pero el propio presidente del Atlético de San Luis admitió que el deseo del jugador era irse a Europa, no cambiar de equipo dentro de la Liga MX. Esa fue una de las razones por las que se cayó la operación, además de diferencias económicas.

A un año de aquel intento, Sanabria sigue en San Luis y no ha dado el salto internacional. Para muchos en Coapa, jugar en América sería el trampolín perfecto rumbo a Europa, como ya lo fue para otros uruguayos. Pero si no lo convencen pronto, el club podría volver a quedarse con las manos vacías.