La construcción de la inmensa grandeza de América llevó tiempo y mucho trabajo. Lo cierto es que hubo épocas maravillosas y otras en las que los títulos no abundaron, pero, de alguna manera, Las Águilas siempre salieron a flote y remontaron la situación. Una mala experiencia vivieron a principios de la década de 1990.
Conla intención de replicar el maravilloso éxito de los 80, la directiva contrató a Hugo Sánchez, una figura excluyente que llegó tras obtener trofeos pichichis y brillar en Atlético de Madrid y Real Madrid. Sin embargo, en el vestidor lo esperaba Antonio Carlos Santos, quien en ese entonces era el protagonista del equipo.
Ambos tenían un conflicto muy particular: el Negro salía conEmma Portugal, con quien después mantuvo 27 años de matrimonio. El problema era que ella antes había formado una familia con el mexicano ytenía dos hijos. Esa particular dinámica fue descripta por el exfutbolista Oscar Ruggeri, también partícipe de esa escuadra.
“Santos se casó con la exmujer deHugo Sánchezy teníamos a los dos en el vestuario. Yo me sentaba a lado de Hugo, elPichichi, y me decía: ‘Oscar, dile al esclavo que cuando yo llamo no atienda, que yo quiero hablar con mis hijos'”, señaló el campeón del Mundo con Argentina en 1986.
La dura respuesta del Negro
“Negro, ¿escuchaste? Te dijo esclavo que no atiende el teléfono”, le señaló el zaguero, a lo que el creativo respondió de manera durísima: “Oscar, dile que mande más plataque no nos está alcanzando”. ¡Qué ambiente se vivía en aquella época!
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