Son días difíciles, oscuros y llenos de incertidumbre para Álex Renato Ibarra Mina, el extremo ecuatoriano de América que fue denunciado en las últimas horas por su esposa Lucely Chará por violencia doméstica.

El jugador fue trasladado este domingo al Reclusorio Norte de la Ciudad de México para la audiencia que debió afrontar a las 9 horas, mientras se recupera de la grave lesión sufrida en el tendón que culminó con la operación y la inactividad hasta abril.

El futbolista pasó 48 horas detenido y estuvo en la Fiscalía de la Capital, aunque por el momento continuará en libertad hasta que el proceso finalice y se determine oficialmente si fue violento o no.

Si bien en un momento se rumoreó que había llegado a un acuerdo con su pareja, el abogado de ella, Renato Cháves, lo desmintió categóricamente con su testimonio para el diario El Universal:”Mi clienta y yo no hemos hablado nada sobre eso y todo lleva su curso normal desde lo legal”.

Ibarrá permanecerá imputado por la Justicia hasta que el caso se resuelva y la institución del Nido de Coapa ya comunicó que, de ser declarado culpable, será expulsado del club y no portará más la camisa azulcrema. Ibarra llegó en 2016 al Ame, donde acumula más de 100 partidos y 3 trofeos obtenidos.

Mientras se recupera fue a ver a El Nacional de Ecuador, el club del que es fanático: