La situación médica del delantero chileno Nicolás Castillo ha sido más grave de lo esperado, a tal punto que, a la espera de que le den el alta médica, deberá cambiar radicalmente su vida, producto de la trombosis que sufrió hace unas semanas.

Según ha podido reportar el diario Récord, el jugador andino tiene prohibición de regresar a las canchas por tiempo indeterminado, incluso no puede volver de manera inmediata a la actividad física, debido a que el tratamiento a seguir contempla el uso de anticoagulantes, algo que “no está recomendado con un ejercicio extenuante y mucho menos arriesgarse a una nueva lesión muscular y ósea que sea contraproducente por la formación de coágulos y porque las hermorragias pueden ser constantes”.

A esto se agrega que deberá estar sometido a una estricta dieta alimenticia “para verificar y controlar sus niveles de coagulación en la sangre”, teniendo prohibido tomar cualquier suplemento alimenticio o algún vitamínico, controlar el consumo de ciertos alimentos flatulentos o verduras de hoja muy verde, además de tener prohibido el consumo de alcohol y fumar.

Además, Nico deberá tener una especie de filtro en la pierna, no podrá hacer esfuerzos físicos ni apurar su proceso de recuperación, porque en caso de no seguir ninguna de estas advertencias, el peor diagnóstico es que no podrá volver a jugar al futbol.