El americanismo se encendió en segundos: una foto de Nicolás Castillo dentro de las instalaciones de Coapa bastó para que las redes preguntaran si había “refuerzo de última hora”. El ex delantero chileno apareció junto al kinesiólogo Fernando Gilardi y las redes explotaron.

Entre nostalgia por su paso y la ilusión de un ‘9’ más, la conversación creció mientras América prepara la jornada 6. Pero detrás de la imagen hay un matiz que baja la espuma sin apagar la curiosidad por lo que realmente ocurrió en el nido.

¿Visita que prende alarmas o simple reencuentro?

Fuentes cercanas al club señalan que se trató de un gesto amistoso: Castillo pasó a saludar al cuerpo médico con el que guardó relación durante su etapa en el equipo. No hubo pruebas físicas, negociación ni movimiento de plantilla. Hoy, el chileno milita en Santiago City, segunda división de Chile y su situación contractual pertenece a ese proyecto.

¿Por qué la foto con el área médica activó al americanismo?

El registro junto a Gilardi se leyó como guiño deportivo. En Coapa, sin embargo, la agenda está clara: plantel presentado, roles definidos y un calendario que no da respiro. El contexto del equipo no apunta a movimientos de emergencia; el foco está en consolidar funcionamiento y dar cabida a los refuerzos ya anunciados.

La postal deja, eso sí, una reflexión: el impacto emocional que conserva América en quienes pasaron por su vestidor. Nico fue un caso de resiliencia y cercanía con la afición; cada aparición suya conecta con la memoria reciente del club.