Santiago Cáseres confesó qué fue lo que más lo impresionó de América

Después de no tener continuidad en Villarreal, Santiago Cáseres recaló en el Nido de Coapa en este 2020 y, en la entrevista con Mediotiempo, reveló que sigue impactado por la grandeza de esta institución: “Pisar el Estadio Azteca fue algo sensacional por lo que significa para los argentinos, lo he disfrutado mucho y me impresiona cada vez que juego en él. Soy un privilegiado de jugar en un Estadio con tanta mística y tanta historia”.

Sin embargo, el contención que surgió en Vélez también explicó que tuvo ciertas dificultades en su llegada a la Capital: “Lo más complicado ha sido la adaptación de pasar de una ciudad pequeña a una grande. Estoy muy a gusto, conforme, y lo poco que conozco me ha gustado y me gustaría conocerla más cuanto todo esto pase. La altura es muy complicada, que es en lo que más he sufrido”.

Cáseres comparte el centro del campo con el paraguayo Richard Sánchez, con el que llegó a conformar una buena dupla antes del pausa oficial del balompié a nivel global por la pandemia del coronavirus: “La adaptación con Richard va muy bien, hemos disputado cuatro o cinco juegos juntos y lo hemos hecho bien a pesar de que hemos compartido muy poco tiempo, pero sus características hacen que todo se haga más fácil, por el momento lo llevo bien”.

Los pocos minutos acumulados con el Submarino Amarillo lo hicieron retroceder en su carrera, aunque los azulcremas le devolvieron las ganas de saltar a una cancha: “Desde que me tocó llegar he recuperado la confianza y hoy disfruto volver a jugar después de seis meses”. Si bien en el primer semestre en La Liga de las Estrellas fue titular casi siempre, el cambio de entrenador le hizo perder ese lugar de privilegio.

Así juega Santi:

De a poco, el volante de 23 años, 1.77 m. y 70 kilos le toma la mano a este país y ya está listo para cuando retorne la actividad tras el COVID-19: “La adaptación va bien, iba a paso lento,es una lástima que haya pasado estopero llevaba un buen ritmo y me estaba acostumbrando a la altura. Sólo queda esperar para acortar ese plazo de adaptación”.