El 2025 quedará marcado como un año de fracasos monumentales para el Club América. Tras perder la Liga MX, la Concachampions y quedar fuera del Mundial de Clubes, la humillación fue total al ser eliminados en cuartos de final por Rayados. Esta debacle cortó una racha de cuatro años de protagonismo y dejó a la afición herida.

A pesar de la urgencia de una limpia, el americanismo se ha llevado las manos a la cabeza tras confirmarse que el club desistió de contratar a Agustín Palavecino. La directiva consideró “excesivos” los 10 millones de dólares que pide Necaxa, dejando al descubierto la verdadera y dolorosa realidad que se vive en las oficinas de Coapa.

La cartera del América está cerrada para los refuerzos

En las últimas horas se confirmó que el América no solo le cerró la puerta a Palavecino, sino que también enfrió el fichaje de Kevin Castañeda, pues los 6 millones que exigía Tijuana no fueron “justificados” según la directiva. Esta falta de inversión ocurre mientras el equipo acumula fracasos y la competencia se refuerza hasta los dientes.

La directiva encabezada por Santiago Baños vio pasar dos semanas de descanso tras el Apertura 2025 sin mover un solo dedo. No hubo altas, no hubo salidas y, lo más preocupante, se ignoraron las necesidades de un plantel que luce desgastado. Pareciera que en las altas esferas del club existe una alarmante comodidad con la mediocridad actual.

André Jardine solicitó seis refuerzos para enderezar el barco, pero la directiva solo se comprometió a concederle dos. Sin embargo, con la pretemporada ya en marcha, la cuenta sigue en cero. La razón es clara: el Club América no está dispuesto a invertir las cantidades que exige el mercado moderno, dejando al técnico brasileño solo contra el mundo para el 2026.