Pocos nombres han causado tanto ruido en Coapa como el de Agustín Palavecino. El “cerebro” del Necaxa se ha convertido en la obsesión personal de André Jardine para el Clausura 2026, una petición expresa para recuperar esa agresividad ofensiva que parece haberse diluido en los últimos meses. Sin embargo, el camino no es sencillo; la directiva de los Rayos ha puesto un precio estratosférico por el argentino, frenando en seco las negociaciones iniciales de Santiago Baños.
La moneda está en el aire, pero la sola idea de ver al sudamericano vestido de azulcrema ha encendido una chispa de esperanza en el americanismo. No se trata de un simple capricho, sino de un plan maestro para rodear a Álvaro Fidalgo de un socio a su altura, capaz de transformar el mediocampo en una máquina de generar peligro constante. ¿Logrará el Club América abrir la cartera por un futbolista de 29 años o dejará escapar la oportunidad de crear un mediocampo de época?
¿La mejor pareja creativa de México? Los números que blindan el sueño de Jardine
Los fríos números de la plataforma especializada Statiskicks confirman que esta no es una corazonada. Agustín Palavecino y Álvaro Fidalgo dominaron por completo el 2025 en el rubro de pases progresivos por cada 90 minutos en toda la Liga MX. Palavecino lideró el ranking con un promedio brutal de 9.9 pases hacia adelante, mientras que nuestro “Maguito” lo siguió de cerca en la segunda posición con 8.9. Juntar a los dos mejores constructores de juego del país sería un golpe de autoridad sin precedentes.
Esta dupla no solo garantiza posesión, sino verticalidad pura. Ambos mediocampistas comparten el ADN de mirar siempre al frente en cuanto reciben el esférico, rompiendo líneas defensivas con servicios quirúrgicos. En un sistema como el de Jardine, que privilegia la circulación rápida y el ataque constante, tener a los dos máximos exponentes de la progresión de balón en el mismo once convertiría al América en una pesadilla táctica imposible de descifrar para cualquier rival.
El riesgo económico es real debido a la edad del jugador, pero el beneficio deportivo podría ser la llave definitiva hacia la 17. Si la directiva logra destrabar la operación y liberar el presupuesto necesario, estaríamos ante el regreso de la identidad ofensiva total que enamoró a la afición en los primeros torneos del técnico brasileño. Es una apuesta por el talento puro que pondría a las Águilas, nuevamente, a años luz de distancia del resto de los equipos en México.
