En medio del shock que provocó la brutal patada que el defensor de Chivas, Antonio Briseño, le propinó al delantero del América, Giovani dos Santos, una imagen dio vuelta al mundo, cuando el portero Guillermo Ochoa fue a encarar al rival, y en redes sociales, se acusó de que le habría lanzado un escupitajo.
Pues bien, en medio de los reclamos, principalmente de aficionados rojiblancos y de periodistas exigiendo una sanción en contra del meta, Memo salió a aclarar lo ocurrido en redes sociales.
Con un contundente “Así es… NUNCA ESCUPÍ”, Ochoa desmintió tajantemente haber atacado al Pollo previo a que el árbitro Fernando Guerrero le pusiera la tarjeta roja.