A más de un mes de haber terminado el Clausura 2025, el Club América sigue sin anunciar refuerzos y eso ha encendido las alarmas en toda la afición azulcrema. Lo que empezó como una espera razonable, hoy ya se vive con preocupación. Aunque desde dentro del club insisten en que primero quieren cerrar algunas salidas antes de fichar, la realidad es que los movimientos son nulos. Sin embargo, una decisión de fondo estaría cambiando la manera en que se armará el nuevo plantel.

Santiago Baños, presidente deportivo del club, habría optado por ceder parte del control de las altas a André Jardine, entrenador que, pese al duro semestre pasado, ha conseguido seis títulos en dos años. El brasileño tendría un rol mucho más protagónico que en anteriores mercados, eligiendo personalmente a los jugadores que llegarán como refuerzos para el Apertura 2025.

André Jardine tendría voz directa para elegir a los próximos fichajes

De acuerdo con información de W Deportes Radio, la inteligencia deportiva del América elaborará una lista de perfiles viables, económica y deportivamente, y se la presentará directamente a Jardine para que él determine a quién fichar. Esto confirma que el técnico brasileño ya no será solo una figura táctica, sino también estratégica en la confección del plantel. Una prueba de ello fue que se descartó completamente la recomendación de su asistente Paulo Victor sobre el brasileño Wesley Ribeiro.

Con esta decisión, Coapa buscaría minimizar errores como los ocurridos en los últimos torneos, donde llegaron nombres que no convencieron ni rindieron como se esperaba. Jardine tomará un rol activo que podría ser clave para cambiar el rumbo.

Jardine gana peso en Coapa tras dos años de éxitos y seis títulos

Como ya lo adelantó Roberto López Olvera para Águilas Monumental, Jardine tendría más poder en las decisiones deportivas del América. El brasileño ha sido el técnico más exitoso de la institución en los últimos años, y ahora podrá incidir directamente en las decisiones clave para construir el nuevo proyecto.

En lugar de que la directiva tome decisiones unilaterales como en años pasados, este modelo de co-decisión con el cuerpo técnico podría representar un cambio importante en el funcionamiento del club. La pelota está en la cancha de Jardine, y ahora también en su escritorio.