Tras un viaje extenuante desde Japón, parte de la comitiva azulcrema aterrizó en el aeropuerto visiblemente agotada.
Al fin América volvió a México después del frustrante paso por Japón, en un Mundial de Clubes en el que apenas logró terminar en la quinta posición. Visiblemente extenuada por un viaje larguísimo que incluyó escalas en Tokio y Houston, la comitiva azulcrema aterrizó en el aeropuerto del Distrito Federal ante la presencia de muchos periodistas y camarógrafos y pocos simpatizantes ávidos de firmas y fotos con los protagonistas.
La delegación no estuvo completa, ya que algunos futbolistas se quedaron en Asia y retornarán recién en las próximas horas para así iniciar las vacaciones. Las águilas ya piensan en 2016 tras un certamen continental que, sin dudas, dejó gusto a poco.