Uno de los nuevos se va acomodando poco a poco a la presión de América.
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Pedro Arce Latapí sorprendió cuando llegó, pero poco a poco se va acomodando a la grandeza de América en los entrenamientos, primero en las playas de Cancún y ahora ya en Coapa. Al menos él mismo así lo confirmó en La Afición…
Su partida de México a Grecia:
“Fue por cosas de la vida. En mi lugar, en Saltillo, no hay un equipo de fútbol profesional, la oportunidad en su momento fui a Tigres que me invitó a sus Fuerzas Básicas. Luego seguí estudiando, pero a los 18 años ya me dio ganas de ser profesional y fui a Puebla. De ahí me salió la oportunidad de irme a España. Estuve un año y medio allí y ya me fui a Grecia”.
Su arribo al Nido:
“Lo tomé con tranquilidad, significa una gran oportunidad para mí. Nunca tuve amor por un club de México pero ahora sí lo tengo por América. Siempre lo tuve como el club más grande de México, llegar aquí es una alegría enorme y sé lo que significa, lo que representa. Me voy a rajar la madre por esta institución”.
Su posible contribución al equipo:
“Puedo aportar cambio de ritmo, pase, desequilibrio. Me siento tranquilo con el balón y puedo manejar el juego. Me gusta la pelota, intentar cosas diferentes. Confío mucho en mi fútbol, soy un chavo que no tenía nada, no era nadie, y mira dónde estoy ahora”.
¿El Andrés Iniesta mexicano?
“Se malinterpretan algunas cosas. Siempre que me preguntan por un referente elijo a Iniesta porque me encanta su estilo de juego y cómo es fuera del campo. Me encanta él pero hay que respetar las diferencias, estamos hablando de uno de los mejores mediocampistas de la historia”.