El Chino reconoció que no brilló con todo su esplendor en América, pero no se siente en deuda con el equipo.
Silvio Romero pasó ayer por Coapa a buscar sus pertenencias y despedirse de sus compañeros, ya que por la noche viajó rumbo a Argentina para cerrar su traspaso a Independiente.
“Hoy (lunes) me despedí de mis compañeros y del cuerpo técnico, además, tuve una reunión con Mauricio Culebro para ultimar detalles de mi nuevo reto con Independiente. Me voy para afrontar un gran desafío”, comentó el delantero argentino a los medios presentes en el aeropuerto.
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Respecto a su paso por el América, el Chino reconoció que podría haber dado más, pero no se siente en deuda con las Águilas.
“Salí en excelentes términos con compañeros, cuerpo técnico y directiva. Si hago una autocrítica, podría haber dado más, esa es la realidad. Me quedo con el primer año, que fue muy bueno y ya está, las cosas se dieron así”, señaló.
“Me voy bien, contento, siento que no estoy en deuda con el club y aunque es difícil dejar un equipo como América porque para mi es el más grande, me entusiasma el nuevo reto con Independiente”, agregó.
Para cerrar el artillero de 29 años confesó que le costó tomar la decisión de abandonar México.
”Además del restaurante estaba acá un tema familiar muy importante. Estoy bastante arraigado con el país, me ha costado tomar una decisión, pero bueno, encaminamos ese detallito familiar que teníamos y nos vamos tranquilos. Por eso, cuando pasó lo de Chiapas, cuando pasó lo del sismo, fuimos los primeros en ayudar, junto con todos ustedes. Fuimos unos mexicanos más, la verdad que nos han tratado excelente”, concluyó.
