El América desperdició una oportunidad difícilmente mejorable para golear a su máximo rival y dejar el partido de hoy como uno de los más recordados por la afición azulcrema en la historia de los Clásicos Nacionales. En efecto, por una suma de factores que intentaremos exponer en esta columna, el conjunto de Coapa dejó ir una chance que podría no repetirse en mucho tiempo, de derrotar categórica y escandalosamentea Chivas y así darle a sus seguidores un arma de un poder incalculable para defenderse decualquier burlay salir airoso de cualquier discusión sobre este bellísimo deporte, más precisamente sobre el Clásico de Clásicos del futbol mexicano. Lo que planteamos en la última frase les puede parecer,estimados lectores,un tanto cómico, pero en la realidad del aficionado futbolero de nuestro país, es tal cual. ¿O no? Bueno, veamos. Imagínese usted en una conversación futbolera con amigos, familiares, compañeros de oficina o con las personas que usted guste. Una (o más) de estas personas es fanático del Guadalajaray de pronto comienza un debate (por no decir discusión) sobre los dos equipos más grandes del país y cada uno expone sus argumentos para defender suscolores y para intentar convencer al otro de que el América essuperiora las Chivas, o viceversa. Aquí es donde se utilizaría el “arma de un poder incalculable” de la que hacíamos referencia. Es decir, los seguidores de Chivas llevan más de 13 años regodeándose por un 5-0 a su favor que quedó marcado, para bieny para mal,enel corazón y en el recuerdo de cualquier aficionado rojiblanco o azulcrema, respectivamente. En la tarde de hoy, las Águilas pudieron regalarle algo similar a su gente, sin embargo le perdonaron la vida al rival y se conformaron con un discreto 1-0 que probablemente se quede como un Clásico más en la historia de estos apasionantes duelos. No es que los americanistas no dispongan de otras “armas” para ese tipo de situaciones, sin ir más lejos, la final ganada frente al Rebaño en la temporada1983-84, la única que los dos grandes han disputado entre sí(que probablemente sería la “bomba atómica” si nos mantenemoscon la mismaanalogía), pero, ¿a quién no le gusta hacerse más fuerte? Pasemos ahora a los porqués de este desperdicio “atómico” del que hablamos al principio del texto. Primero que nada, y con esto no se descubre gran cosa, están las fallas de los jugadores, que se pueden explicar distinto en cada circunstancia en la que se hayan presentado. Es decir, A Reyna le faltó frialdad en sus dos oportunidades ante Luis Michel, en una estrelló el disparo en el cuerpo del arquero y en otra lo quiso eludir. En ambas pudo definir de otra manera, pero elprincipalproblema fue que ejecutó mal. Cabañas no estuvo en sus días de inspiración y aún así creó situaciones para celebrar goles. Un remate de cabeza que el defensa sacó en la línea cuando Michel ya no llegaba, un disparo al cuerpo del portero luego de una jugada individual en un contragolpe y algún disparo lejano fueron las acciones de peligro más notables que realizó el paraguayo. Montenegro tardó casi una mitad de partido parainvolucrarse en el juego ofensivo de las Águilas, y cuando lo hizo tuvo dos disparos por abajo a los que les faltó algo de colocación, además de uno de zurda que hizo lucir nuevamente al guardameta rojiblanco. Pável Pardo nopudodispararal arco, pero sí estuvo muy fino con sus ejecuciones de pelota parada. En más de una ocasión mandó “dardos envenenados” de los que solamente uno, el primero, terminó en gol. En este párrafo podemos incluir los remates imprecisos (por cualquier circunstancia) de varios jugadores que ganaron bien por aire pero que les faltó potencia y dirección a los cabezazos. Ahora el técnico, quien a nuestro parecer tiene un gran porcentaje de responsabilidad de que el partido haya concluido solamente 1-0. El primer tiempo fue uno de los mejores desde que “Chucho” se sienta en el banquillo del América. Chivas no creó nada al frente y el partido fue de un solo lado, ¿por qué cambiar de estrategia? No lo sabemos con certeza, pero intentaremos explicarlo: Ramírez se llevó una muy mala experiencia en abril pasado cuando no sólo perdió su primer Clásico, sino quese ganó laantipatía de muchos americanistas al restarle importancia al encuentro contra Chivas con sus declaraciones. Todo esto debió influir para que el entrenador haya querido amarrar la victoria a cualquier precio en lugar de arriesgar el resultadocon unabúsqueda más agresiva de mayor cantidad de goles. Lo absurdo es que con el planteo del primer tiempo jamás estuvo en riesgo el resultado, si no pregúntenle a Ochoa que si tocó la pelota fue solamente para sacar de meta o para salir jugando. No es la primera vez que este técnico peca de conservador, pero lo que sí demostró hoy fue una pésima lectura del partido. La muestra más clara de ello fue cuando sacó al mejor jugador de la cancha hasta ese momento: Enrique Esqueda estaba dando su mejor partido como profesional, no sólo por las jugadas lujosas, sino por el desequilibrio y la desconfianza que le estaba generando a los rivales. A pesar de esto, lo sacó de la cancha y a partir de ahí el equipo disminuyó notablemente su poder ofensivo y comenzó a coquetear con el conformismo, un mensaje claramente enviado desde la banca, independientemente de que haya sido su intención o no. Por último, dentro de todos los motivos por los que el América no goleó hoy, se encuentra el cuerpo arbitral, que inexplicablemente no señaló un penal a favor de los locales luego de una mano tan grande como el Azteca. Si bien este últimode los porqués del desperdicio americanistano fue responsabilidad ni de los jugadores ni del técnico, era imposible dejarlo de lado. En fin, ustedes queridos visitantes de AméricaMonumental.com, tendrán la mejor opinión y podrán estar o no de acuerdo con lo que planteamos en esta columna, que aclaramos, no tiene la intención de ser pesimista ni de quitarle valor y mérito a la victoria americanista (que lo tiene y mucho), simplemente que por el desarrollo del encuentro y las circunstancias del mismo, pensamos que se quedó corta y que pudo haber sidoun sucesoextraordinario para el mundo americanista. Artemio Flores, Director Editorial de AméricaMonumental.com Foto: Mexsport
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Un desperdicio atómico
El América desperdició una oportunidad difícilmente mejorable para golear a su máximo rival y dejar el partido de hoy como uno de los más recordados por la afición azulcrema en la historia de los Clásicos Nacionales.
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