Raúl Jiménez cerró el 2025 con una imagen que parecía imposible tiempo atrás. El canterano del Club América marcó un gol de último minuto que le dio la victoria al Fulham ante el West Ham United, confirmando un resurgir que hoy ya es incuestionable.
Después de haber estado al borde del retiro por una grave fractura de cráneo, el delantero mexicano volvió a competir al más alto nivel. Este año no solo fue uno de los mejores de su carrera en Inglaterra, también lo devolvió al centro del escenario, con goles decisivos y liderazgo dentro del campo.
El festejo que expuso su verdadero peso en el vestidor
Tras el silbatazo final, las cámaras captaron una escena reveladora. Todos los compañeros se volcaron sobre Raúl Jiménez, lo abrazaron y lo celebraron como el hombre clave de una victoria que significó mucho más que tres puntos.
El gol no fue una casualidad aislada. Refleja el rol que Jiménez ha construido en el Fulham, donde se ha consolidado como el referente ofensivo pese a los constantes intentos del club por reforzar la delantera con nuevos nombres.
A sus 34 años, Raúl vive una segunda plenitud futbolística. Sigue ganando cada competencia interna, responde en los momentos límite y llega en plena forma a la Copa del Mundo. Para el americanismo, cada festejo suyo en Europa confirma una verdad incómoda: la cantera sigue marcando diferencia, incluso lejos de casa.
