La Selección Mexicana volvió a mostrar carencias ofensivas en la Copa Oro, pero en medio del desconcierto apareció uno que no falla: Raúl Alonso Jiménez. El delantero surgido en el América regaló una asistencia espectacular en el partido contra Arabia Saudita en los cuartos de final, y aunque no marcó, fue clave para destrabar el partido cuando más lo necesitaba el “Tri”.
La jugada no solo dejó en claro que Jiménez sigue siendo un jugador con clase, sino que su visión y técnica están intactas. Desde que llegó al Fulham no se le veía con tanta confianza, y su intervención fue determinante para que México se pusiera en ventaja.
El lujo de Raúl Jiménez que abrió el marcador para México
Corría el minuto 48 cuando México recuperó el balón tras un mal saque de banda de Arabia. Lejos del área, Raúl Jiménez recibió de espaldas, entre dos rivales, y con una categoría tremenda filtró un pase perfecto para el desmarque de Alexis Vega. El atacante de Toluca falló en su primer intento, pero aprovechó el rebote para empujarla y firmar el 1-0 momentáneo.
La asistencia de Jiménez fue una pintura. Técnica, visión y temple para jugar fuera del área: el canterano azulcrema demostró que su talento asociativo está más vigente que nunca. Aunque no fue gol suyo, la jugada llevó su firma y fue lo mejor que ofreció México en todo el partido.
Raúl Jiménez, sin gol, pero aún en el top histórico del Tri
A pesar de su buen desempeño colectivo, Raúl sigue sin anotar desde la primera jornada. Frente a Arabia, Surinam y Costa Rica, el delantero no ha vuelto a marcar. Aun así, se mantiene como el tercer máximo goleador en la historia del Tri, con 41 tantos.
Está a cinco goles de Jared Borgetti con 46 y a 11 de Javier “Chicharito” Hernández con 52. El camino no será fácil, pero si Raúl vuelve a tomar confianza, el récord aún puede estar en la mira. Su pase ante Arabia demuestra que, incluso cuando no anota, sigue marcando diferencia.