En el futbol mexicano, pocas decisiones mueven el tablero como las del Club América. Y en 2025, la noticia que más ruido hizo no fue un fichaje: fue la entrada de General Atlantic como socio tras adquirir el 49% de los activos vinculados al América, el Estadio Azteca y los terrenos aledaños, en una operación que se ha manejado como una inyección de capital estratégica.
El americanismo lo mira con mezcla de ilusión y ansiedad, porque el foco inmediato parece estar en la remodelación del Azteca, mientras la conversación de refuerzos se enfría. Pero la lectura de fondo es otra: el América estaría marcando un camino financiero que varios equipos ya estarían volteando a ver.
¿Se viene una “ola” de fondos de inversión en la Liga MX tras el movimiento del América?
La apuesta es clara: abrir la puerta a capital externo para fortalecer activos y acelerar proyectos de largo plazo. La venta del 49% a General Atlantic no solo genera liquidez; también instala un modelo que suena “corporativo” y que puede redefinir cómo se financian los clubes en México.
Por eso no sorprende que ya circulen reportes sobre otros equipos que podrían explorar rutas similares. Se ha mencionado a Atlas como uno de los clubes más próximos a seguir esa línea, con versiones que lo vinculan a un posible interés de inversión desde el extranjero, aunque sin confirmación oficial. Lo mismo con Querétaro, que también ha sido colocado en la conversación de fondos, en este caso con un posible perfil estadounidense.
Si esa tendencia se confirma, la Liga MX entraría a una etapa donde el músculo ya no solo se mide en cancha, sino en estructura y estrategia de capital. Y ahí, guste o no, el América vuelve a poner la agenda: el que quiera competir arriba, quizá primero tenga que aprender a jugar este partido fuera del campo.
