El nombre de Guillermo Ochoa volvió al centro del debate: sin club tras el cierre del mercado europeo y fuera de la convocatoria de Javier Aguirre para septiembre, el tema incendió mesas y redes. El mensaje del técnico fue duro y claro: para ir al Mundial hay que jugar y rendir.
En medio del ruido, apareció una voz inesperada: Luis Ángel Malagón, hoy portero del Club América y competencia directa por la titularidad del Tri, salió a defender a Ochoa. En semanas de críticas, el gesto encendió otra conversación en el vestidor y en la tribuna.
¿Competencia o lealtad? Malagón sale en defensa de Ochoa
Lejos de aprovechar la coyuntura, Luis Malagón marcó postura y tono. En conferencia, lo puso sin rodeos: “Yo lo defiendo porque es mi amigo… existe respeto y lealtad… aquí no hay mala leche”. El mensaje vale en lo deportivo y en lo humano: competir no cancela la camaradería.
Para el americanismo, la declaración habla de liderazgo emocional y de un guardameta que entiende el tamaño del escudo. En Selección, ordena la narrativa: puertas abiertas a la meritocracia, cero guerra interna.
Malagón, hoy una de las pocas certezas del Tri
Desde el regreso de Aguirre, Malagón ha sido apuesta constante: proceso sostenido, madurez y un verano donde México levantó la Copa Oro 2025, con reconocimiento al arquero por su torneo. La foto actual lo coloca un paso adelante.
¿Garantías absolutas? Ninguna. Pero el presente competitivo y la continuidad con el América lo perfilan como titular probable si consolida forma y liderazgo en los próximos meses.