Edson Álvarez salió del Ajax por la puerta grande. Pero su paso por Ámsterdam no fue sencillo, ni mucho menos. Y es que el ex América recibió ataques de todo tipo, especialmente de las leyendas del gigante neerlandés.
En Países Bajos consideran que la buena técnica, la versatilidad y visión de juego son requisitos que debe cumplir cualquier jugador antes de portar la playera del Ajax. Es por eso que la llegada del Machín generó tanto ruido.
Históricos como Marko van Basten o Ronald de Boer fueron algunos de los que tanto señalaron a Álvarez, a quien no consideraron como un elemento válido para el mediocampo de un equipo tan ofensivo como el Ajax.
“Gravenberch y Álvarez no son los mejores futbolistas. Gravenberch no ha estado bien en los últimos partidos. Tienes que lidiar con eso. Álvarez no es un chico que juegue con facilidad en posesión“, dijo Van Basten en su momento.
Pero de Boer fue mucho más allá: “Todavía no estoy realmente convencido de Álvarez (…) Pero cuando el Ajax tenga la posesión, igual no tiene la calidad que se necesita; no es muy creativo en mi opinión”.
Sin embargo, el Machín no solo demostró que tenía la calidad necesaria para el juego al primer toque, sino que además era una pieza necesaria para aportar solidez y permitir que los atacantes jugaran con libertad.
La crisis del Ajax
Son horas muy complicadas en Ámsterdam. El equipo marcha en el puesto 14 con apenas cinco puntos y a lo interno se vive una crisis sin precedentes, luego de una pésima planeación en el mercado de pases.
Todo esto se produce tras la salida de Edson Álvarez, ese jugador que parecía ‘extraño’ para la filosofía del Ajax y que ahora está brillando en una de las ligas más competitivas del planeta con el West Ham.