Pese a que ha tenido encuentros con un nivel de juego superior, América consiguió lo que buscaba y se llevó una vez más los tres puntos en el Clásico Nacional. En el Estadio Azteca, venció por 2 a 1 a Chivas y reivindicó su liderato, a la vez que estiró a once su increíble racha de encuentros sin caídas.
El compromiso fue lo que prometía y contó con varias situaciones de gol, incidencias y polémicas. La jugada de discusión más clara se dio a los 54 minutos. Cuando Las Águilas ya ganaban por 2 a 0, pero veían ceder su protagonismo en el inicio del segundo tiempo, Sergio Flores, de El Rebaño, cabeceó potentemente el balón y el portero Guillermo Ochoa realizó una salvada memorable.
La fuerza y los reflejos del guardameta alcanzaron a desviar el balón para que no ingrese a la portería. Sin embargo, desde el Guadalajara reclamaron que la acción debía haberse marcado como anotación porque la pelota "había cruzado la línea de gol". Tanto el VAR en ese momento como otros estudios se encargaron de demostrar que no había sido así.
La palabra de Ochoa
La palabra que faltaba era la del protagonista. En la conferencia de prensa previa a los choques de la Selección mexicana frente a Perú y Colombia, Paco Memo señaló que "nunca fue gol" la acción. ¡Asunto terminado!
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