La carrera profesional de Nicolás Ignacio Castillo se ha convertido en una verdadera pesadilla desde que llegó a América en 2018, pues las continuas lesiones no lo han dejado demostrar el muy buen nivel que lo llevó a brillar en Pumas, a Europa y a ser Campeón con su Selección. Ahora, cuando parecía que la vuelta estaba más cerca luego de la larga recuperación de la trombosis postoperatoria sufrida en febrero pasado, el calvario continúa para él.

Según informó el sitio CANCHA, el delantero chileno de 27 años ya sabe que su trayectoria está en peligro y que, de regresar a las canchas, su salud correrá serios riesgos, además de que el tratamiento para la puesta a punto y las secuelas que el mismo dejará tal vez no le permitan llegar ser el jugador que fue alguna vez.

Si bien no quisieron revelar la fuente, en el artículo recogieron un testimonio de alguien cercano al atacante: "Normalmente este tipo de pacientes, después de un padecimiento así, se deben anticoagular. Los pacientes anticoagulados deben tener ciertos cuidados para evitar las lesiones o los golpes, ya que les pueden provocar sangrados o hemorragias que lleven con esto a otra lesión. Secundario al tratamiento quirúrgico, tanto ortopédico como angiológico, puede que el rendimiento que tenía Nicolás antes de las cirugías se vea mermado. No sabemos si con la rehabilitación recupere la capacidad futbolística previa a las cirugías".

Siguen los días de incertidumbre sobre su futuro (Jam media).

"Ya lo operaron de una arteria y de una lesión ortopédica, no es un jugador normal. Quizá pueda jugar, ¿pero realmente va a regresar a como era antes?", se preguntaron allí mientras el sudamericano cumple al ciento por ciento las órdenes tanto del Cuerpo Técnico de Miguel Herrera como del Preparador Físico Gíber Becerra, del kinesiólogo del club y de la nutricionista también. La disciplina de Nico para llevar a cabo todas las tareas obligatorias es total, al igual que el sacrificio que realiza a diario.

A todo esto, el Piojo ya reveló que finalmente el cupo de extranjero de Castillo será liberado de cara al Apertura 2020 de la Liga MX, que en realidad se llamará Guard1anes, por lo que el ex-Benfica no podrá participar al menos hasta el 2021. Además de sus ciclos en Universidad Católica, Brujas, Maguncia y Frosinone, el ariete de 1.79 m. y 78 kilos acumula apenas 26 partidos oficiales con 9 goles, 4 asistencias y 2 títulos en esta temporada y media con la playera azulcrema.

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