El ex-Director Deportivo es el responsable de la idolatría de la que hoy goza el del Tri, ya que lo trajo en su momento pese a las críticas. Hoy, el público americanista quiere mucho a Miguel Layún. El lateral viene de jugar un buen Mundial y lo hace bien en defensa y en el mediocampo. Incluso, anota y le marcó un histórico póker a Santos Laguna en Torreón para la goleada. Sin embargo, en su momento, era resistido, se fue a Europa y no tuvo suerte, regresó y ahora es un futbolista mucho más completo. Pero además de él mismo, hay otro gran responsable de este muy buen momento: Jaime Ordiales. Sucede que el ex-Director Deportivo fue quien lo trajo al club y lo mantuvo pese a todos los cuestionamientos en ese entonces: “Hubo muchos años que me decían que lo quitara, cada seis meses me decía la Directiva que lo quitara y no lo hacía porque sabía que iba a funcionar… Tanto que todos los técnicos siempre lo utilizaron, menos Carlos Reinoso”, manifestó con orgullo públicamente.
“Zague me había pedido que se fuera Layún, no por quitarlo, sino por un análisis que ya había de jugadores que podían ocupar de la cantera y dije que para mí no, y no hicimos ningún movimiento”.
A su vez, contó cómo fue todo en aquella época: “Cuando renuncio en la última temporada (Apertura 2011]), sólo me quedé hasta el Draft, y me piden que arme al equipo y llevo tres jugadores: Jesús Molina, Paul Aguilar y Chucho Benítez. Ahí Zague me había pedido que se fuera Layún, no por quitarlo, sino por un análisis que ya había de jugadores que podían ocupar de la cantera y dije que para mí no, y no hicimos ningún movimiento”. Y, en una entrevista, Ordiales dio más detalles de lo sucedido: “En el Apertura 2011 se cae el equipo y a él (Layún) lo relegan mucho, mucho, ya no estaba yo porque ya había renunciado, pero en ese torneo todo mundo se le fue encima, no podía ni salir (a la calle) porque toda la gente se le iba en contra”, se animó a revelar así cuestiones que no eran públicas, pero que ahora surgieron debido al buen momento del lateral.
“No encontrábamos laterales derechos y jugamos un partido amistoso ante Veracruz, y me encantó por atrevido, por su gran potencia física”.
Por último, Ordiales refrescó el instante previo a la contratación del mundialista y le dio mérito al real “descubridor” del Layún, Miguel Herrera: “No encontrábamos laterales derechos y jugamos un partido amistoso ante Veracruz, y me encantó por atrevido, por su gran potencia física. Dominaba varias posiciones, lo seguí, y después de un segundo partido amistoso me terminó de gustar. Costó mucho trabajo contratarlo porque, después de Veracruz, sus promotores lo querían llevar a Italia y en una ocasión le pregunté a Herrera porque era importante consultar con un DT que lo hubiera tenido, y me dijo que era un jugador excelente. Fue cuando regresó de Italia y lo podía conseguir, así lo traje y así me da mucho gusto saber que le ha ido bien”, concluyó. Así fue la verdadera historia, hasta aquí desconocida, del flamante ídolo azulcrema. ¡Gracias Ordiales! ¡Gracias Layún! Revive el histórico póker de Layún en Torreón:
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