Tras el 1-3, la mayoría de la afición les cayó encima a Ambriz y a Quintero.
La tarea de América fue mala frente a Atlas, aunque la mayoría de la afición apuntó fundamentalmente a dos hombres: Ignacio Ambriz, que no empezó bien su ciclo ni mucho menos, y Darwin Quintero, quien volvió a jugar mal en el Estadio Azteca a pesar de la aceptable pretemporada que había hecho.
Los cuestionamientos hacia el primero tienen que ver con sus planteos tácticos y el flojo juego del equipo, aunque es verdad que recién inicia esta etapa. En cuanto al colombiano, el club ha destinado una fortuna en el semestre pasado para su contratación, aunque aquel nivel brillante que mostró en Santos Laguna hasta ahora no se ha visto ni por asomo en Coapa. Para colmo, se hizo expulsar cuando aún quedaban 20 minutos y se retiró con pitidos.
Tal vez de esa manera se expliquen los abucheos para uno y las críticas para el otro. Ahora que ya están en las águilas y no hay vuelta atrás, no queda otra que apoyar a ambos.