El zaguero de Atlas aclaró que no será especial enfrentar a las Águilas, ya que no tiene buenos recuerdos de su paso por Coapa. Edgar Castillo es uno de los exfutbolistas del América que ahora visten la playera de los Zorros, equipo al que las Águilas recibirán este sábado en el Estadio Azteca, por la última jornada del Apertura 2014 de la Liga MX, buscando llegar a la Liguilla como líder absoluto. Sin embargo, el defensa que jugó en el Nido entre 2008 y 2009, y luego regresó en 2011, no tiene buenos recuerdos de su estancia en Coapa, por lo que significa mucho para él enfrentar al más grande de país.

No tuve mi mejor etapa en América y para mí no significa mucho enfrentar a América, un equipo más

“La verdad sí, no puedo dejar a los equipos (sic) que el equipo de atrás que fue Xolos, muy bien, ahora los cinco meses que llevo acá, estoy muy agusto y agradecido con todos los que confiaron en mí y me trajeron acá. Pasé por ahí, pero no le tengo un cariño al América”, comentó. “Es un equipo que está en los primeros lugares, que va muy bien, que juega bien, se ha mantenido en los primeros lugares, para mí no significa mucho, sí pasé por ahí, regresé seis meses estuve ahí, luego me voy a otro lado, regreso, pero no tuve mi mejor etapa en América y para mí no significa mucho enfrentar a América, un equipo más, pero sí me gustaría ganarle”, agregó. “Es un partido importante, es el cierre del torneo, es un equipo grande América, que todos le quieren ganar, igual yo sí le quiero ganar, para nosotros es ganar o ganar, un punto no nos ayuda de nada, pero igual, un punto caeríamos abajo, es ganar y esperar resultados, para mantenernos en los primeros lugares”, concluyó. + Pronostica América – Atlas + Vota por el mejor gol de las Águilas en el certamen + Buscan reemplazante para Layún + El mensaje de Jiménez a Simeone + Peláez confirmó interés por un ecuatoriano + Sanvezzo interesa en América + Destacan a Ochoa en España + América sufrió a Sanvezzo en el Apertura 2014 + Los apuntados para el Clausura 2015 + Están en deuda + Las seis máximas virtudes del equipo + El probable extraño destino de Memo