Después de meses de rumores, finalmente se confirmó: Álvaro Fidalgo ya es ciudadano mexicano. Tras casi cuatro años jugando en el Club América, el centrocampista español ha obtenido oficialmente su nacionalidad mexicana, lo que abre la posibilidad de que algún día vista la camiseta de la Selección Mexicana.
Sin embargo, aunque muchos aficionados sueñan con verlo defender al Tri, hay aspectos reglamentarios que considerar antes de que Fidalgo pueda ser convocado al Tri, y que, por el momento, lo mantendrán lejos del equipo que dirige Javier Aguirre.
FIFA permitiría a Fidalgo jugar con México hasta 2026
De acuerdo con los estatutos de la FIFA, para que un jugador pueda representar a una selección diferente a la de su país natal, debe cumplir con uno de los cuatro criterios establecidos. En el caso de Fidalgo, no aplica ninguna de las tres primeras opciones relacionadas con parentesco, por lo que debe cumplir con la cuarta:
“(D) El jugador ha vivido al menos durante cinco años después de llegar a la edad de 18 años en el territorio de la asociación en cuestión”, señala el reglamento de la FIFA.
En este contexto, Álvaro Fidalgo podrá ser elegible para representar a México hasta febrero de 2026, cuando cumpla cinco años residiendo en el país como jugador del Club América. Hasta entonces, no podrá ser considerado por la Selección Mexicana.
Fidalgo podría liberar una plaza de extranjero en el América
Más allá de lo que significa su nacionalización para el Tri, este cambio tiene implicaciones directas para el Club América. Según una regla introducida por la Federación Mexicana de futbol antes del Apertura 2024, los jugadores naturalizados que representen a la Selección Mexicana dejarán de ocupar una plaza de extranjero en sus equipos y pasarán a considerarse como jugadores formados en México.
Si Fidalgo llegara a ser convocado al Tri, el América podría liberar una plaza de extranjero, lo que le permitiría reforzarse con otro jugador no formado en México sin afectar la cantidad permitida por reglamento.