El reciente escándalo de Televisa por su presunta participación en el “FIFA Gate” ha generado preocupación entre los aficionados del Club América y del Estadio Azteca. Este caso, que involucra supuestos sobornos a altos ejecutivos de la FIFA para asegurar derechos de transmisión exclusivos de las Copas del Mundo, ha resultado en la renuncia de Emilio Azcárraga al consejo de administración de Televisa. Sin embargo, gracias a decisiones estratégicas recientes, se asegura que tanto el Club América como el Estadio Azteca están blindados ante cualquier repercusión futura relacionada con esta investigación.
De acuerdo con Brian Rodríguez, analista de Grupo Financiero Monex, en una charla con Récord, el Club América y el Estadio Azteca están protegidos del escándalo debido a un cambio en su estructura de propiedad, que los coloca bajo la administración de Grupo Ollamani, una empresa independiente de Televisa. Este cambio permite que ambos activos mantengan sus operaciones sin estar sujetos a los problemas legales que enfrenta la televisora.
Club América y el Estadio Azteca: fuera del alcance del FIFA Gate
Según Rodríguez, la reestructuración administrativa de los activos deportivos de Televisa ha sido una medida estratégica clave para evitar cualquier implicación legal o fiscal que pudiera afectar al club o al estadio. Desde abril de 2024, Grupo Ollamani asumió oficialmente la administración tanto del Club América como del Estadio Azteca, desvinculandose de cualquier posible sanción en caso de que Televisa enfrente penalizaciones graves por el FIFA Gate .
Este escándalo, que ha puesto a Televisa en el centro de una investigación a nivel internacional, ha tenido repercusiones en la dirigencia de la empresa. Aunque Emilio Azcárraga ha dejado su posición en el consejo de administración de Televisa, en Grupo Ollamani quien ha tomado el liderazgo es Guillermo García Naranjo Álvarez, reforzando así la independencia del América y del Estadio Azteca frente a los problemas legales de la televisora.
Futuro estable para el América y el Estadio Azteca
Gracias a esta reestructuración, el Club América puede enfocarse en sus actividades deportivas sin temor a interferencias legales derivadas del escándalo de Televisa . Ahora operando bajo una razón social diferente, el equipo disfruta de una situación privilegiada que protege su estabilidad financiera y su imagen pública en la Liga MX. Para los aficionados, esta separación asegura que el club siga funcionando de manera independiente y se concentre en sus objetivos deportivos sin preocuparse por posibles repercusiones externas.
Por otro lado, el Estadio Azteca, también operado por Grupo Ollamani, continuará sus actividades normales, incluidas las renovaciones previstas y los eventos masivos, manteniendo su relevancia como sede principal del Mundial 2026 en México . Esta independencia refuerza el compromiso de Grupo Ollamani de mantener el “Coloso de Santa Úrsula” en óptimas condiciones, asegurando su papel como escenario de eventos nacionales e internacionales.