Si algo marcó a esta edición del Clásico Joven entre América y Cruz Azul en la Liga MX fue la polémica del VAR. Los dos goles del empate a uno fueron por la vía del penalti, tanto el de Emanuel Aguilera como el de Jonathan Rodríguez; además, los dos fueron revisados toda vez que de inicio no se había marcado nada en sus respectivas acciones.

Sin embargo, cuando el partido estaba 0-0, hubo una jugada en la que José Joaquín Martínez abrazó a Sebastián Cáceres dentro del área y posteriormente lo derribó. La acción parecía sumamente sancionable, pero no fue así, de la cabina del videoarbitraje no hubo señalamiento alguno y todo siguió su curso.

En las repeticiones se pudo apreciar con más claridad el momento en el que Shaggy obstruye el movimiento de Cáceres y posteriormente lo manda al suelo, aunque al final, parece que eso no fue suficiente para que se señalara la pena máxima.